Si eres como la mayoría posiblemente te ha pasado que tienes una maravillosa idea, te entusiasma muchísimo y empiezas a pensar en com lograrla.
Sin embargo una vez que empiezas el proceso de diseñar la implementación: detalles que hacen falta, recursos que vas a necesitar, y equipos de personas que necesitas armar, empiezas a darte cuenta de que no será tan fácil como pensabas, de repente ya no sabes como podrás lograrlo.
En este punto muchos pierden el entusiasmo y simplemente piensan que era una buena idea pero que no pueden llevarla acabo, que este no es el momento o que simplemente no tienen las habilidades o recursos.
Este efecto es lo que se llama vivir bajo la tiranía del cómo. Y esta es una de las razones por las cuales tantas personas no se atreven a emprender o a crecer hasta sus más locos sueños.
“La tiranía del como es una ilusión mental. Es una gran mentira”
Digo esto porque cuando nos dejamos avasallar por la falta de claridad con respecto a cómo vamos a poder lograr algo, no estamos tomando en cuenta una de las habilidades más básicas del ser humano: nuestra capacidad de desarrollo, aprendizaje, y crecimiento.
Se nos olvida que durante toda nuestra vida hemos estado enfrentados a proyectos que están muy por encima de nuestra capacidad en un momento determinado y que, es usando todo nuestro potencial para convertirnos en la persona que puede llevarlo a cabo, que hemos terminado exitosamente con estos proyectos.
Solamente piensa en tus estudios escolares
¿ Cuando nacemos qué tipo de capacidad tenemos para pensar que algún día vamos a hacer bachilleres? ¿qué nos puede dar indicio de que un niño de seis meses algún día podrá ser un nadador? ¿O un jugador de béisbol profesional? El proceso es obvio y lo hemos vivido, sin embargo, no lo tomamos en cuenta cuando se nos prende el fueguito de un sueño en nuestro corazón.
La diferencia está en que en el ejemplo anterior hay todo un sistema social establecido que nos lleva de camino y nos motiva en el proceso de adquirir los conocimientos, recursos y actitudes que nos van a llevar al logro.
En el caso de un emprendimiento o de proyectos en nuestra vida de adultos que no están dentro de los estándares normales de la sociedad, lo que tenemos a nuestro alrededor, a veces, es un sistema que hace exactamente lo contrario: Explicarnos por qué no se va a poder y motivarnos a que no nos tomemos riesgos porque podemos fallar.
En lugar de encontrar motivación, empuje, Fe y todos estos otros ingredientes motivadores que encontramos en nuestro desarrollo cuando crecíamos dentro del “sistema”, lo que encontramos es duda de los demás que alimenta la duda propia.
Ahí es donde radica la importancia De entender el principio de la asociación: dime quién con quién andas y te diré quién eres.
Es muy importante ser intencional con respecto a las personas que te rodean: que el ambiente que tengas a tu alrededor sea de respaldo. Se parte de comunidades que te refuercen, respalden y empoderen para que puedas llevar a cabo este proceso que es natural para ti pero que no siempre funciona tu favor.
Lo que tienes que recordar siempre es que los comos nunca existieron, todos fueron creados. Y fueron creados por personas que sabían que querían y por qué esto era importante para ellos
Así que, visita tu corazón y piensa de nuevo en esa idea, ese proyecto, esa vida que quieres vivir y no te preocupes si sabes cómo hacerlo realidad. Solo da el primer paso. Empieza ahora ¿Con qué? Con lo que tengas a mano. Eso te va a llevar a un primer nivel de logro, lo cual te va a dar más recursos para dar el siguiente paso y, así sucesivamente, cuando te vayas a dar cuenta estás cada vez más cerca e inclusive has sobrepasado el resultado que estabas buscando
Recuerda siempre esto: no importan los recursos, lo que importa es tu recursividad.
¿Qué es esa palabra? Esa palabra significa tu capacidad para crear los recursos donde no hay. Cada uno nosotros tenemos una fuerza interna la cual no conocemos y nos toma mucho tiempo usarla consistentemente, una fuerza que nos permite encontrar las personas, las situaciones, atraer las condiciones que hacen falta para encontrar los comos para nuestros que.
Es como siempre digo: sólo una vez que tu claridad de propósito y tu compromiso con alcanzarlo generan la energía para que pongas acción masiva es que la Gracia de Dios entra en juego.
Esa fuerza infinita que te da ideas, te pone en los lugares correctos en el momento correcto, te atrae a las personas correctas, y hace que se den “casualidades” que no son más que la manifestación del poder de estar conectado con la Fuente.
Así que, cuando tengas una idea nunca tengas miedo del cómo la llevarás a cabo. Sencillamente profundiza en ella, pregúntate si realmente es importante para ti y, si loo es, visualízala lograda, empieza con lo que tengas en el momento y ya verás como poco a poco el camino se va esclareciendo.
